martes, 9 de junio de 2009

Cuando no estas ...

Como una noche sin luna, sin estrellas,
como un pozo sin agua,
como un niño sin sonrisa,
como un pájaro sin alas,
como un mar sin peces, sin agua,
como un perro sin dueño,
como un jardín sin flores,
como un bosque sin abetos,

así me siento cuando no estas ...
sin tu amor, sin tus besos ...

11 comentarios:

Unknown dijo...

como el aire sin oxígeno..

imposible respirar

Te deseo un lindo día
Besos, Oscar.

Diosaoasis dijo...

Es verdad a veces uno se siente sola cuando no esta la persona amada.
Mucho sentimiento en lo que escribistes
Un abrazo en a distancia.

Jose Ramon Santana Vazquez dijo...

...ausencia de la esencia en tu sentimiento libro abierto a la vida...y desde mi alma en horas rotas te invito a bailar con besame , espero te agrade, mis cien gotas de amor y una mas conmigo ciento una...jose ramon...---

THE QUEEN TAIS dijo...

QUE BELLO... SI YO LE ESCRIBIERA EN ESTE MOMENTO, NO TENGO LETRAS PARA HABLAR... ASI QUE TALVEZ LE ESCRIBIERA TU POEMA PARA QUE ME ENTENDIERA LO QUE SIENTO SI NO ESTÁ.... BESOS............THE QUEEN

Patricia Ibarra dijo...

Se hace uno adicto a ese ser..
lo sé lo he vivido...
Gracias por seguir, por estar y por compartir.
Besos!

Juani dijo...

cuando falta la persona amada, falta todo eso y mas
saluditos

silvina soul dijo...

es muy bonito

Patricia dijo...

Es un dolor que pasa (todo pasa) pero cuando esta latente por la ausencia de ese amor deja una herida que al momento parece dejar sin oxigeno...tienes razon,
cuanta pasion! muy lindo,
besos, feliz semana!

Francisco Javier dijo...

Pues eso, cuando no estas, no soy el mismo que cuando estoy contigo. Besitos amiga.

Unknown dijo...

Es precioso mi amor. Yo siento lo mismo cuando no estoy contigo, no podria describirlo mejor, eres mi todo muaaaa

Cien gotas de amor dijo...

Gracias a todos por vuestros comentarios, por seguir pasando, por seguir compartiendo, vuestros comentarios son la parte mas bonita de este espacio y los que me animan a continuar escribiendo dia tras dia, abrazos,

Laura